¡Arrancó la quinta generación de Luna!
Cada vez que comienza un nuevo ciclo del Programa de formación feminista estamos llenas de emoción de dar la bienvenida a las nuevas alumnas. Muchas preguntas rondan nuestra cabeza ¿Quiénes serán estas mujeres increíbles que conformarán la nueva generación? ¿De dónde serán?, ¿a qué se dedicarán?, ¿Cuál será su historia?, ¿Cómo llegaron al feminismo?
Este septiembre, dió inicio la 5a Generación de Luna, y al igual que en las sesiones anteriores, conocer a las nuevas alumnas fue muy enriquecedor.
Unas del norte, unas del centro del país, otras de fuera, unas muy jóvenes, otras mayores, unas mamás, unas sin hijos/as, unas casadas, otras en relaciones libres, otras solteras, unas músicas, unas psicólogas, unas con mascotas, algunas introvertidas, otras extrovertidas. Pero todas, absolutamente todas, con algo en común: el deseo de aprender más sobre teoría feminista.
Hay una frase que dice que “las mujeres se vuelven feministas por su propia historia” no sabemos bien de quién es, pero no podríamos estar más de acuerdo, y es que, desde que somos niñas, podemos experimentar en nuestra realidad corporal que el mundo tiene un lugar muy diferente designado para mujeres y hombres, por ejemplo: que a los días de nacida nos hagan agujeros en las orejas porque somos niñas, que debamos usar falda desde los tres años como uniforme escolar, aunque sea incomodo y nos impida escalar arboles, porque somos niñas, que sólo podamos usar juguetes que recrean estereotipos femeninos porque somos niñas, que debamos ser calladas y discretas porque somos niñas, que en la ruralidad no tengamos garantizado el derecho a la educación, porque somos niñas, y un largo muy largo etcétera ¡Y aún ni siquiera llegamos a la adolescencia!
Las injusticias en la historia de cada una de nosotras, es el común denominador de nuestra existencia pero también de nuestra resistencia, desde algunos años muchas de nosotras empezamos a cuestionarnos nuestro alrededor y en esa búsqueda de respuesta nos encontramos en el feminismo, nos encontramos a nosotras mismas.
Es por ello que damos la bienvenida a esta nueva generación de alumnas que durante un año irán juntas en este camino de aprendizaje y crecimiento, sepan que Luna es su espacio seguro en el que le damos un nuevo sentido a estudiar, reflexionar y pensar juntas, en donde las preguntas y los análisis son bienvenidos, donde tu pensamiento y reflexiones son valiosas y poderosas y vamos en tribu para vivir el profundo proceso de pasar de la queja a la vindicación.
~ Montse Peña
